Sunday, January 27, 2008

Duermes, lo sé

Te robaste la noche
y la duermes insensatamente,
aturdida y espumosa,
como un pez anacrónico.
Y te curvas hacia el cielo
para llover las mismas aguas,
cuando sueñas lo mismo
que tus ojos sabían.

Parece que entiendes el lenguaje
que las sombras acumulan,
como cenizas de astros
y consigues palabras
imposibles para la voz
de los despiertos.

Te adueñas de todo sin querer,
hasta del que suspira por ti,
del vuelo antes de ser volado,
de los besos
y las selvas
y despiertas como si no hubieras nacido,
con amagos de novia,
sin imaginarte a ti misma,
con esa inocencia criminal
de las vírgenes.

Pastor Aguiar

Marinas

El mar se anida en la tarde
despeinándose en la brisa.

Lleva un ramo de gaviotas
reflejadas en la espuma.

Es bala mansa, sin rumbos,
barbecho azul en el líquido.
dobleces de cicatriz.

El mar que viene sediento
a beberse las orillas
mirándome
esas regiones que ya fueron,
parte de mí.

Me siento herido en sus venas,
mínima señal de que estoy vivo
y que de un moemnto a otro,
seré pez.


Pastor J. Aguiar